miércoles, 16 de octubre de 2013

Camposanto nocturno 1

    Volvió a mirar el celular, lo desbloqueó con el patrón y ahi estaba su wasap y esa chica no se había vuelto a conectar nunca mas, no hizo falta más para suponer que ella dejó el teléfono y la conversación con él para sumergirse en una completa felicidad, porque al ególatra le duele la soledad pero no le duele tanto como para dejar de pensarse el centro de las historias.
    Volvió a cruzarse de vereda porque no tenía ganas de escuchar los piropos de esos gays que salen a la avenida de noche para construir ese estado de gomorra con el que decoran su deseo y el trayecto que va de Callao a Pueyrredon. Una parejita hetero, un chico y una chica alargaban la despedida de una cita que había sido primeriza y encantadora, se notaba porque ninguno de los dos quería soltarse, seguro que vivían con sus padres o por alguna razón no continuaban el proceso de expropiación del alma en un cuarto en una posición horizontal en un telo, pero no querían despedirse, eso estaba claro, se sentaron en el escaloncito del edificio porque sabían que la charla seguía un rato mas todavia, se sentaron y se rieron de cualquier cosa, estaban donde querían estar, cuando a las personas les pasa ese estado transitorio de estar donde quieren estar se les relajan los músculos de la cara y del cuerpo, pero eso no podia verlo yo, la visual se les reduce a un cuadradito más chico, un pixcel de expectativas, más próximo.
    Cuando su conquistador hablaba la chica trataba de no mirarlo tanto a los ojos porque no quería quedar indefensa de lo tanto que le estaba gustando la situación, el chico avanzaba, porque eso había aprendido, que a las chicas había que avanzarlas, que el truco estaba en darle canon a esa energía, en no soltarla toda de golpe, saber vender el producto y apropiarse de las expectativas. Mientras tanto yo, el testigo ocular siguió caminando cuando advirtió que la pareja ya lo había notado y no quiso arruinar el momento, no quiso que su estado de nihilismo emocional arruine la esperanza de dos chicos que todavía no se habían podido lastimar.
    El ruido blanco porteño que lo tranquilizaba era el de autos que pasaban ligero, de tráfico y de tiempo, de luces que eran lineas o luciernagas urbanas, como una constante y de la soledad que habilita a los que caminan de noche como lo hice toda la vida, yendo a sus trabajos de horarios no convencionales, a los puestos de flores, a los diarios, con artistas mal pagos, que tratan de dormir alertas, como un cansancio que no se cura nunca. Sabía el chico que si volvía a su casa no iba a poder dormir, sabía eso y entonces evitaba la enorme tarea de intentar dormirse, no faltaba mucho para que se haga la hora donde desayunan los que no tienen problemas de agenda. Fue que supuso que comer era un buen reflejo a la falta de reflejos que a esta hora lo atacaba.
    Entonces quiso pensar o despensar que pensando en otra cosa iba a dejar de pensar en eso que no tenía que pensar, pero el ejercicio de querer llenar con un caudal mejor el goteo solo hizo que se agote y cuando te cansás de pensar es muy distinto, porque se puede cansar el cuerpo, y eso se recupera durmiendo, comiendo, descansando, pero cuando la cabeza se agota es distinto, se hace difícil porque no hay indicaciones ni escapatorias claras, cosas del alma tal vez.
    Se fue nomas, agotado mucho mas de la mente a comer al café que quedaba en la esquina de su casa y que si bien no era un café recordable los mozos lo llamaban por su nombre, lo saludaban y lo hacían sentir un ser específico en una red complicada de depresivos que es el barrio del CAMPOSANTO en la Chacarita. Hundió una medialuna de manteca de San Remo, que ya no eran tan grandes, en la espuma confusa de un café grande y fue lo primero que comió en muchas horas, después de lo que había sido una jornada laboral improductiva, pero que había necesitado del gasto energético que fue salir de la cama, y la PC, bañarse lentamente con la musica de un CD de ella de fondo y volver a pie sin un plan de viaje pensado. Cuando comió se dio cuenta de que tenía hambre, que tenía mucha hambre y se comió las tres medialunas al hilo y con la boca llena como un tipo que vuelve de la guerra le pidió a Abel el mozo un tostado y sintió que tenía más hambre de la que había tenido en mucho tiempo entonces sintió su cuerpo, sintió la comida bajar. Bajaba su alma también con el horario y alli en frente del cementerio como telón.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Si es cosa perversa quedarse así de mudo,
cuando el alba conversa,
perder el alma y quedar desnudo...
del sufriente cuerpo que te versa.

viernes, 30 de agosto de 2013

Me ha pasado
Despertar en un cuarto que no es el mío
En una cama extraña con una extraña
Abrazar su presencia solo ese instante.
Las mujeres están todas locas
Para el contento de lo que busca el hombre

Levantarse y darse cuenta
Que una mujer no completará nunca ese vacío
Que son la hembra de otra especie
Extinguieron al macho
Fueron por nuestras hembras
Y ahora por nosotros

Lo están logrando
Mientras el cuerpo sigue ahí rendido
El espejo del pequeño baño
Me observa como un vidrio roto
Ella me mira
Para mirarme a mí mismo, feo
Está siempre en desacuerdo con todo
Aunque me diga que sí.

¿Qué haces ahí parado?
¿Te viste?
¿Dónde están esos ojos de niño soñador?
Solo ves el rostro de un hombre que se olvidó de quien era
Navegando por los ríos de mierda de esta cultura
Donde antes supieron navegar los piratas que ahora trabajan en la aduana
O chupan bombachas.

Vuelvo a las sábanas
Y de nuevo la fricción
La saliva
Las sabanas
Y esa mujer con todo su misterio
Su geografía biológica
No es para entender
No es para suplir
Es y solo ahora
Es bella y mortal
Una pequeña muerte cotidiana más.


Somos inventores constantes

    Me constituyo en cuanto a mi envoltura biológica que, por supuesto, luego es tomada por la cultura, por el significante, es decir, por aquello que vendrá a nombrar este organismo y a delimitarlme lo que le estará permitido hacer y todo lo que estará prohibido, desde el incesto y el parricidio en adelante. 
   Me siento dividido en este caso, neuroticamente por un lado y me preparo para no ser el objeto del deseo del Otro, y por ende, de mi mismo. No quiero completar la falta de saber ni, llegar a la conclusión de nada. 
    Para que me otorgan un nombre, un apellido, una nacionalidad, una sexuación, o sea, una filiación,
¿Esto me defina, esto dice lo que soy?. 
    En otros términos 
¿La cultura me otorga la explicación de lo que soy, soy el lenguaje que me designa, ese número?
    Algo tan básico y complejo como el lenguaje podrá tanto en la medida que lo permita. Somos inventores constantes de todo lo que sucede dentro y fuera de nuestra biología y desde ahí a la sociedad que se organiza como memoria viviente, como esto que nos rodea sin pausa. Soy el único ser viviente deseante, el único que pregunta el qué, el por qué, el para qué, y el cómo de la puta vida, yo, el mortal, lo sé.  Soy un ser humano, una creación, un verbo, algo distinto por momentos a un animal, soy esta instancia sin armadura estable en busca de un objeto indefinido que incita el acto creador e incluso el destructor. 
    Escribo por esto, a veces pinto y saco fotos... 






    Los muertos no forman parte de mi vida, pero podrían necesitar ser parte de los demás. Estos muertos podrían ser todo lo que necesitan y tal vez quieran que yo sea el propio muerto de alguien. Las palabras son esos muertos, los otros, esos próximos sujetos que nos rodean, todos muertos. Ese sujeto que te mira en la calle, esa persona que duerme en tu lecho. Todos sujetos a algo, a la cultura, a su biología, a su pasado y no a su futuro, que tal vez sea la repetición, una vez mas, de todo lo que viene sucediendo desde hace tiempo. 
    Necesitamos gozar, buscamos el goce, el placer que nos arrebataron, buscamos el resultado, eso es la cultura de la que escribo, es el intento repetido por aprehender lo real mediante el intento por romper el límite que este lenguaje que construímos determina. 
    Lo real ¿Que carajos será lo real? 
    ¿Esto que no para de no escribirse? 
 Que mierda queremos completar, esto es lo que llaman realidad, a donde ir, esto es el futuro, el paraiso que nos prometieron desde niños. Por esto peleamos, amamos, destruímos y creamos constantemente... 
    
 (continuará)

jueves, 29 de agosto de 2013

Nada Nadie Nunca Gracias.

Nada

luz, 

fuego 
cielo. 
Nada 
pie 
uña. 
Nada 
frío 
mano 
ver, 
sentir 
quietud 
tiempo 
sabanas. 
Nadie 
noche, 
agua 
sed 
cuerpo, 
piel 
tetas 
noche, 
calor 
besos 
labios

Labios
sudor. 
Nada
Nadie
Nunca
Gracias.
humo 

ojos, 

temor
ropas 
silla, 
adiós.


Nada
duda 

temblor 

sangre
vida
no estoy 

soy. 

Nada, 
presencia, 
aire
piel
bebo, 
mundo 
mañana, 
bajón 
revés
plano
estrategia, 
ayer 
desamor 
llanto. 
Nadie, 

muere, 

espaldas 

sol 
aves, 
flics 
sol
mar, 
el olvido 
piedras
hay? 
Nadie. 
gusano. 
Nada

vos


voz. 

Nada

Nadie
Nunca
Gracias.

Una sombra

Parado de espaldas a la ventana,
Miro mas allá de las paredes,
Percibo su lejana imagen, creo que es ella, 
Me pesa y pasa de largo.

Siento sobre mi encierro su leve peso
la del pasado
Creo que en este momento estoy solo en el mundo
Hasta dios creo que debe estar preso.

Del otro lado de la Ventana,
Mas allá del perro que ladras, hay mas paredes,
Percibo su lejana imagen, creo que es ella, 
Me pesa y pasa de largo


...